Este proceso lo promueve el Ministerio de Cultura con la participación de siete organizaciones indígenas.
LIMA. En diciembre de 2015, se inició el proceso de consulta previa del reglamento de la Ley de Lenguas Indígenas (N° 29735). Este proceso lo promueve el Ministerio de Cultura (Mincul) y vienen participando siete organizaciones indígenas. Dichas organizaciones saludaron el inicio de la consulta del Reglamento, toda vez que hace cuatro años denunciaron la omisión de la consulta previa en la aprobación de la referida ley.
El reglamento de la Ley de Lengua Indígenas, es una norma que afecta directamente a los pueblos indígenas. Ella debería establecer garantías para la protección de los derechos lingüísticos y asegurar el mantenimiento de los dialectos, más aún cuando a la fecha 37 de lenguas originarias se habrían extinguido, según el Mincul.
Henderson Rengifo, presidente de Aidesep, expresó que el objetivo que tiene la Ley de Lenguas es respetar los derechos que tienen los pueblos en todos los niveles: “Nosotros esperamos que se respete la expresión de los pueblos en su propio idioma, que sean reconocidos y se valore su cultura, eso ayudaría fortalecer la identidad de los indígenas”, manifestó a INFOREGIÓN.
Las siete organizaciones convocadas a este proceso son la Confederación Campesina del Perú (CCP), Confederación de Nacionalidades Amazónicas del Perú (CONAP), Confederación Nacional Agraria (CNA), Federación Nacional de Mujeres Campesinas, Artesanas, Indígenas, Nativas y Asalariadas del Perú (FENMUCARINAP); así como la Organización Nacional de Mujeres Indígenas, Andinas y Amazónicas del Perú (ONAMIAP); la Unión Nacional de Comunidades Aymaras (UNCA) y la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP).
OMITIÓ CONSULTA
La “Ley que regula el uso, preservación, desarrollo, recuperación, fomento y difusión de las lenguas originarias del Perú” (Ley de Lenguas Indígenas) fue promulgada en julio del año 2011, sin haber sido consultada a los pueblos indígenas, en ese entonces se alegó que la omisión se debía a que aún no se contaba con una Ley de Consulta Previa, la misma que fue aprobada un mes después. No se tomó en cuenta, que estaba vigente el Convenio 169 de la OIT, el cual fue ratificado por el Perú el año 1994 y entró en vigencia en 1995.
Antolín Huáscar, presidente de la Confederación Nacional Agraria (CNA), señala que “esa ley debió aprobarse mediante consulta previa con los pueblos indígenas, pero ellos la aprobaron sin consulta porque dicen que la ley todavía no estaba promulgada; sin embargo, ya existía el Convenio 169 y no lo hicieron, no hubo voluntad política”.
Con la decisión de consultar el Reglamento, el Estado peruano parece buscar reivindicarse con las comunidades en este tema, así lo perciben sus organizaciones representativas:
“Como nosotros no hemos participado de la ley misma, teníamos esa inquietud sobre la reglamentación. Es positivo para nosotros que haya una Ley de Lenguas Indígenas, pero todos estos años estuvimos con la expectativa sobre cuándo se iba a reglamentar. Sin embargo, terminamos el año 2015 con esa buena noticia de que sí se reglamentará y que se realizará consulta previa”, manifiesta Ketty Marcelo López, vicepresidenta de la ONAMIAP.
Para Aidesep, la consulta del Reglamento también es necesaria, a pesar que no se haya realizado consulta a la Ley de Lenguas. Henderson Rengifo considera que los procesos de consulta han ido evolucionando con los años y que los pueblos siempre han sido dialogantes y tolerantes en los procesos, por eso han aceptado participar del proceso en marcha.
¿QUÉ SE ESPERA?
En el Perú se hablan 47 lenguas originarias (cuatro andinas y 43 amazónicas), según el Ministerio de Cultura. Dicha entidad también informó que otras 37 lenguas, se habrían extinguido. A eso se suma que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) señaló que 29 lenguas oriundas estarían en peligro de extinción.
Las alarmantes cifras hicieron que en el Perú se inicie un proceso de revalorización de las lenguas indígenas que tiene como un hito, la reglamentación de la Ley de Lenguas. Al respecto, las comunidades se preguntan de qué manera se beneficiarán. Si en adelante, podrán expresarse y serán atendidos por las instituciones estatales en sus propias lenguas.
La lingüista Nila Vigil señala que ésta es una situación complicada: “Ni la ley ni el reglamento son suficientes para la revalorización, pero sientan un precedente y llenan un vacío legal que siempre estuvo presente, pues los derechos lingüísticos están entrando en la agenda nacional. El reconocimiento de las lenguas indígenas en pie de igualdad con el castellano, servirá para dejar de lado el imperialismo lingüístico del castellano. Ahora las personas podrán exigir ser atendidas en sus lenguas, en todas las instancias estatales”, enfatiza Vigil.
Para Ketty Marcelo, los usos lingüísticos de las lenguas indígenas deben tener mayor importancia: “Necesitamos impulsar las lenguas nativas desde los diferentes espacios, que se den como una normativa para que prevalezcan en todas partes. Por ejemplo, que en las instituciones públicas como las municipalidades o Gobiernos Regionales se atienda a las personas en sus lenguas maternas”, comenta la vicepresidenta de la ONAMIAP.
LENGUA MATERNA
Si bien se espera que las lenguas indígenas se revaloren en la comunidad en general, también hay una necesidad de que los estudiantes de los pueblos originarios puedan ser educados revalorando su lengua indígena y que la misma sea considerada como otro idioma al momento de culminar sus estudios.
Antolín Huáscar declara que una de las cosas que espera se logren con la ley es que haya profesores bilingües en las escuelas y universidades, que hablen la lengua materna, pues considera que se ha perdido mucho y espera que esa situación pueda revertirse: “De esa forma, podemos tener de aquí a unos 15 o 20 años, profesionales hablando diferentes lenguas maternas. Ese es el objetivo”, sustenta el presidente de la CNA.
Para Nila Vigil, se trata de un asunto de derechos humanos, pues considera que hay muchos niños indígenas que son torturados y burlados constantemente al no permitirles comunicarse en su lengua materna. No obstante, agrega que hay nuevas leyes como la Ley Universitaria (N° 30220) que han abierto camino a la revalorización de las lenguas: “La ley universitaria, reconoce que para doctorarse se pueden escoger dos lenguas extranjeras o una lengua extranjera y una lengua peruana, esto también servirá para revalorar nuestras lenguas indígenas”, señala la lingüista.
Similar opinión tiene Ketty Marcelo, pues alega que están buscando que sus lenguas sean respetadas también en los centros universitarios: “Cuando los jóvenes terminan la universidad, les piden el inglés como segunda lengua, ahora nosotros queremos que las lenguas originarias también sean consideradas y que los estudiantes awajún o asháninka sigan haciendo prevalecer sus lenguas nativas”.
Henderson Rengifo expresa que los amazónicos tuvieron que aprender a hablar el castellano, por eso considera que no es ajeno que otras personas puedan aprender sus lenguas como el awajún o el achuar, entre otras: “Quienes tal vez deberían aprenderlas son los funcionarios públicos, de la salud e incluso de los ministerios, pues así podríamos conversar en confianza y entendernos mejor porque es diferente hablar en tu lengua originaria”, sostiene.
A pesar que es un paso más al reconocimiento indígena, los integrantes de las organizaciones esperan que se sigan visibilizando los temas que los conciernen, pues muchas veces se han sentido invisibles ante el Estado. Asimismo, esperan que no se vean truncadas las políticas públicas que propongan para mejorar la calidad de vida indígena y que la consulta previa al reglamento de la Ley de Lenguas finalice de manera exitosa en marzo de este año.