COVID-19 amenaza a los Pueblos Indígenas, exigimos atención especial para no morir


Han pasado 45 días desde que se decretó el estado de emergencia, sin embargo, las organizaciones de los Pueblos Indígenas observamos con preocupación, que las medidas sanitarias y su implementación no tienen enfoque integral e intercultural y no responden a las características sociales, económicas, culturales de las comunidades campesinas y nativas de la Costa, los Andes y la Amazonia del Perú, los que se observan en todo el proceso de la emergencia.

Ante muchas observaciones y reclamos, recientemente han aprobado el BONO de 760 soles para todas las familias en situación de vulnerabilidad. Al respecto, hemos exigido y pedido a las autoridades correspondientes que no se excluya ni discrimine a ninguna familia y  que se entregue de manera directa en las comunidades haciendo uso de sus padrones, a fin de evitar riesgos por traslado a los bancos y aglomeraciones. Si bien la aprobación del bono es una medida positiva, aun quedan temas pendientes. Por ejemplo, a la fecha, no se ha previsto facilidades para garantizar los trabajos agropecuarios ni el traslado y comercialización de los productos agropecuarios. Muchos agricultores han perdido la cosecha y la siembra está en riesgo. Ante esto,  exigimos coordinación intersectorial y cumplimiento de medidas para garantizar las actividades agropecuarias.

Otro tema de no menor preocupación, tiene que ver con la migración masiva de las ciudades a las comunidades. Las autoridades no han logrado prestar atención adecuada a este fenómeno. Nuestros hermanos y hermanas ya no podían comprar alimentos y pagar alquileres. Sin techo y sin comida, solo les quedaba caminar por varios días para llegar a sus comunidades por cuenta propia. Esta situación ha puesto en mayor riesgo aun a las comunidades; por ello insistimos en nuestro pedido de que se garantice una atención adecuada y oportuna a los retornantes (medios de transporte, condiciones adecuadas para que cumplan la cuarentena por 15 días, pruebas antes del viaje y después de la cuarentena) ; además, preparar a los establecimientos de salud para atender la emergencia en las comunidades (que se contrate profesionales de salud capacitados, implementación con equipos e insumos de establecimientos de salud, dotación de pruebas para COVID-19 y aplicación de la prueba a pacientes que presentan síntomas y en caso positivo, hacer la prueba a todos los contactos). Es sumamente necesario que el ministerio de salud informe con transparencia sobre la situación en la que se encuentran los servicios de salud, las medidas que se están tomando y cuál es el plan de contingencia para atender la emergencia en el ámbito rural. Deben informar de manera transparente sobre el número de casos positivos y fallecimientos de los Pueblos Indígenas.

Otro punto de seria preocupación para la CNA  es la mínima  difusión de información sobre el COVID-19 y las medidas de prevención, hacía las comunidades. Los spots que ha producido el Ministerio de Cultura no son accesibles a la población rural, porque se han limitado a colgar dicho materiale en plataformas digitales, sin considerar que las comunidades no tienen acceso internet. Por ello, exigimos de manera puntual a este sector que se difunda información de mensajes apropiados en lengua originaria a través de la televisión y las emisoras de alcance nacional y local para garantizar que llegue a los pueblos más remotos.

“Parece que nuestras autoridades no comprenden que la propagación del virus podría ser de alta letalidad para nuestros pueblos. Desde que se decretó el estado de emergencia poco o nada se ha hecho para proteger a las comunidades. No existen canales de comunicación con las organizaciones de los Pueblos Indígenas, en las conferencias de prensa diarias no hay ningún medio de comunicación que represente a las comunidades campesinas indígenas nativas. Cualquier decisión debería ser tomada consultando a las organizaciones de los Pueblos Indígenas, no pueden vulnerar nuestros derechos, bajo el pretexto de que estamos en crisis”, enfatizó Antolín Huáscar, presidente de la CNA.»

LOS PUEBLOS INDIGENAS SOMOS MÁS VULNERABLES POR LA HISTÓRICA EXCLUSIÓN Y ABANDONO, HOY NECESITAMOS ATENCIÓN ESPECIAL, QUE NO SE PERMITA NUESTRA EXTINCIÓN.