Nuestros Pueblos Indígenas se mantienen históricamente en situación de exclusión y marginación, siendo uno de los indicadores más visibles la escasa representación en el Congreso de la República. Así, por ejemplo, en el periodo legislativo 2020-2021 no tiene representación y en el periodo anterior solo se contó con la presencia de una congresista indígena sobre un total de 132 escaños en el período 2016-2019.
Recordemos que la propuesta de Reforma Política formulada por la Comisión de Alto Nivel a inicios de 2019 propuso tan solo un escaño para la representación parlamentaria de los Pueblos indígenas, a pesar que, de acuerdo con el último censo nacional del 2017, más de la cuarta parte de la población del país se autoidentifica como indígena (por lo que, en proporción, correspondería asignarles un mínimo de 32 escaños). Cabe anotar que dicha Comisión se limitó reunirse únicamente con los partidos políticos tradicionales, ignorando totalmente a las organizaciones representativas de los pueblos originarios, lo cual constituye una muestra más de la histórica discriminación que padecen nuestros pueblos desde un Estado colonial y renuente a aceptar la plurinacionalidad de nuestro país.
Los primeros días del presente mes, el pleno del Congreso 2020-2021, aprobó una modificación a la Ley Orgánica de Elecciones para crear el distrito electoral de peruanos en el exterior, el cual contará con dos escaños, mientras que para los pueblos indígenas no hubo avance alguno en materia de representación parlamentaria, seguimos siendo invisibles, excluidos y letra muerta para la mayoría de políticos y políticas que irónicamente ocupan su curul, con el voto de ciudadanos y ciudadanas indígenas.
El 8 de julio de 2019, los entonces congresistas Tania Pariona, Marco Arana y César Villanueva, con el respaldo de las organizaciones indígenas y la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDDHH), presentamos ante el congreso de la república una iniciativa legislativa con el objetivo de promover la participación y asegurar la representación política de los pueblos originarios en el Parlamento y en los gobiernos locales. Dicha iniciativa se tradujo en el Proyecto de Ley N.° 4542/2018-CR, “Ley que modifica la Ley Orgánica de Elecciones respecto al Sistema Electoral Nacional”, con el objeto de crear una circunscripción electoral especial que permita garantizar la participación y presencia efectiva de un mínimo de 32 representantes de nuestros pueblos indígenas u originarios en el Parlamento Nacional.
Dicho proyecto de ley, actualmente se encuentra decretada en la Comisión de Constitución, siendo imperativo su aprobación, por constituir un acto de reivindicación y justicia histórica con los pueblos originarios del Perú, quienes desde la invasión colonial hasta nuestros días seguimos siendo excluidos, invisibilizados y despojados de nuestros derechos. “La casi nula participación y representación de nuestros pueblos indígenas en los diferentes espacios públicos de toma de decisiones, repercute negativamente a nivel social, económico, cultural y ambiental”, refiere Antolín Huáscar, presidente de la CNA.
Es preciso remarcar, que este proyecto de ley busca concretar lo dispuesto por el Convenio 169 y la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas (DNUDPI), así mismo, es acorde con la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos referida al derecho de participación política de los pueblos indígenas, específicamente la Sentencia del caso Yatama vs. Nicaragua.
Por todo lo expuesto, exhortamos a los miembros de la Comisión de Constitución y la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos y Afro-peruanos, Ambiente y Ecología, así como, al pleno del Congreso para que, en coherencia con su compromiso de representación y principios de equidad, justicia y democracia, aprueben el proyecto de ley que nace de la demanda y la propuesta de los pueblos indígenas originarios de la costa, los andes y la amazonia del Perú.
¡No más exclusión de los pueblos indígenas descendientes de los pueblos originarios del Perú!
